COCHABAMBA - El Inter Campus ha vuelto a Bolivia, a Cochabamba para ser exactos, para conocer a los chicos y chicas de las áreas desaventajadas en Ticti Norte. También han visitado a los niños de presos en la prisión de San Sebastián.
Cada vez que volvemos a Bolivia, disfrutamos viendo cómo el proyecto dirigido por Massimo y Verónica de la Fundación Casari, se desarrollando en diferentes formas. Los aspectos técnicos y deucativos de los entrenadores locales va mejorando en cada visita. El proyecto de Inter Campus en la comunidad de Cochabamba se desarrolla gracias al comité establecido. El comité está compuesto por padres de la localidad, que están muy activos y siempre se ocupan del campo.
Por un lado, los constantes esfuerzos de Inter Campus y socios locales han permitido a los niños entrenar de una forma organizada y de calidad. Los padres por su parte se ocupan de mantener el campo, cortando por ejemplo el césped e instalando bancos en el lateral para poder seguir los entrenamientos. Además han creado eventos en los que los niños se pueden juntar.
Siempre es algo especial cuando la delegación del Inter Campus viene de visita. Siempre es motivo de celebración. La visita terminó con una mañana llena de diversión en la sede de la Fundación Casari en el Centro Recreativo Educacional. Así es como transcurre cada sábdo junto a los niños de los presos de la prisión de San Sebastián. Muchos de los niños están obligados a vivir en la carcel con sus padres, pero gracias a este proyecto estos niños pueden disfrutar de momentos de calma y de poder jugar sin preocupación al fútbol, disfrutando del tiempo libre. A la hora de despedirnos, Verónica dijo: "Gracias por sacarnos del infierno". Sus palabras fueron muy conmovedoras para ella y para nosotros.