FLORENCIA - En el Gino Bozzi de Florencia, el equipo Primavera de Stefano Vecchi pareció responder después de haber sido eliminado lamentablemente de la UEFA Youth League, pero se le negó la victoria después de un gol en propia puerta en el minuto 93.
El Inter fue el equipo proactivo durante los primeros 15 minutos, pero la primera oportunidad llegó para los locales, cuándo Sottil forzó a Pissardo a hacer una buena parada. En el minuto 23, se rompió el equilibrio del partido, después de que Colidio pasar el balón en profundidad a Odgaard, quién fue abatido por Cerofolini en el área. Hubo penalti. Zaniolo se acercó, miró de dejar atrás su fallo contra el Manchester City y lanzó, anotando un gol que puso delante a los nerazzurri.
El número diez del Inter volvió a ser peligroso en el minuto 28, con un cabezazo tras un centro a balón parado de Danso, pero Cerofolini salvó milagrosamente. La Fiorentina entonces igualó tras un duelo aéreo entre Hristov y Lombardoni, en el que cayó el balón a los pies de Gori que anotó. Zaniolo estuvo cerca de anotar al final del primer tiempo, tras un pase de Emmers. Hubo dos ocasiones para Colidio en el minuto 44, que disparó por encima de la portería. No pudo dar la ventaja a su equipo después de que Zaniolo recuperara el balón.
El Inter se sorprendió al inicio del segundo tiempo cuando Sottil cabeceó solo por el segundo palo tras un pase de Valencic. Después el Inter luchó y Pissardo hizo bien en distraer a Diakhate. En el minuto 63, Zaniolo mostró un poco de ritmo antes de pasar a Odgaard, que tomó el balón con un toque antes de disparar 13er gol de la temporada con su pie izquierdo. Pissardo volvió a la acción con un lanzamiento de Diakhate, desde el centro del campo, que pegó al poste. En el otro lado, Emmers y Zaniolo probaron suerte desde larga distancia.
En los últimos 15 minutos, Vecchi metió a Merola, y el jugador nacido en el año 200, estuvo muy cerca de anotar a diez minutos del final, pero falló por poco. Entonces los nerazzurri volvieron a ponerse en cabeza tras una jugada entre Zappa y Rover, en la que el primero venció a Cerofolini con el gol. Cuando ya todo parecía haber acabado, la Fiorentina empató el partido antes del pitido final, tras un rebote desafortunado de Lombardi en propia puerta, que impidió al equipo de Stefano Vecchi llevarse los tres puntos.
